domingo, 11 de abril de 2010

Miróforas

Noche oscura, es el momento previo al amanecer, mirando por la ventana de mi habitación en Misselthwaite veo una luz titilante y pequeña en la oscuridad... curiosa, me levanto, salgo de la casa y comienzo a seguir a aquella pequeña luz amante... son las piadosas mujeres que con perfumes van a la tumba del Amado... caminan a paso firme por la noche del Jardín diciéndose:

-"Adelante, amigas, vamos a ungir con aromas el cuerpo vivificante y sepultado, la carne que yace en le sepulcro pero que resucita a Adán el caído. De prisa, vamos y como ya lo hicieran los magos adorémoslo, a El que ahora está envuelto no en pañales sino en la sábana, llevemos como dones los perfumes. Y llorando digamos: Resucita, Señor, tú que a los caídos concedes la resurrección."

Callada, seguía yo esa procesión amorosa, sin ser Mirófora yo, más deseando en el corazón también portar aquél hermoso perfume al sepulcro de mi Señor... Caminamos por camino de barro, con dificultad por la poca Luz, hasta llegar a la tumba dónde algo mágico, que ellas no se esperaban, sucedió... "Encontraron a un ángel sentado sobre la piedra. Dirigiéndose a ellas les decía así:
-¿Por qué buscáis al Viviente entre los muertos? ¿Por qué lloráis al Incorruptible como si hubiese caído en la corrupción? Id y anunciad a sus discípulos: Cristo ha resucitado de entre los muertos."

¡Oh Santas y piadosas mujeres!
¡Hermanas mías del corazón!
En vuestro amor al Esposo
se encuentra escondida la llama
que al mundo abrazó.
Ustedes portan el perfume de dulce aroma,
que al abrirse el sepulcro la Pascua anunció.
¿Acaso, nosotras las que las contemplamos,
no nos damos cuenta que la misión
de anunciar a los hombres al Amado,
también, a nosotras simples mujeres,
se nos encomendó?

7 comentarios:

Mary Lennox dijo...

Para los curiosos que siempre andan preguntando la fuente:

Liturgia Bizantina del Tercer Domingo de Pascua.
Exégesis encontrada en la siguiente página:

http://www.mercaba.org/DIESDOMINI/PASCUA/01/la_celebracion_de_pascua.htm#_Toc508248083

Besos

Mary

Ruth dijo...

Eh! Y entre las fuentes no hay ni una mención a Ruth que torturó a su amigo francés para que fotografiara el ícono? Me costó sangre conseguirlo y, encima, me lo quemaste, porque pensaba usarlo! :) :) :) Todo broma. Le debo a Mary el ícono impreso! :) ...y además, a mi paso de lumaca, saldrá algo el año que viene, o el otro, o en el 2015, con suerte.

Hablando en serio: me encantó el post!! Aunque sospecho que ya lo sabías...

Gracias por el link también! Lo guardo para lectura del domingo que viene.

Baci, bella!

Mary Lennox dijo...

El icono lo usé de Guiño, para que mi amiga aclarara que lo tomé prestado de sus habitaciones;-). Y aquí va mi agradecimiento a ella, pues si ella no hubiera torturado a su amigo, y luego no me hubiese mostrado el icono y no lo hubiera yo impreso no sabría quiénes son las miróforas.
¡Contentisima de que te haya gustado!
Baci Bella
Mary

Natalio Ruiz dijo...

Hermoso texto!

Aunque pienso a las mujeres no yendo a buscar o pedir por el resucitado sino a perfumar un cuerpo muerto. Las veo buscando la muerte y encontrando la vida. Las veo caminar en la noche oscura, sin la luz de la Fe en la resurrección.

Igual las veo y las reveo. Me encanta verlas. Me encanta verlas dando a luz la buena nueva antes que cualquier hombre. Me encanta la galantería divina.

Me encanta Dios.

Respetos pascuales.

Natalio

Mary Lennox dijo...

Natalio te pareces a mis peques de 1er año... Mary nos encanta tu materia, es un sacrificio no estudiarla... sonriéndome después de haberse portado mal.
Sí, yo pensaba lo mismo pero me encontré con la liturgia Bizantina, que me hizo pensar que en el fondo quizás ellas iban a la tumba con la muy callada luz de la esperanza de que su amado resucitara... pero como eran mujeres judías y de esa época, eran realistas, estaba muerto... Sólo que la Realidad esta vez las sorprendió, desbordando cualquier loca esperanza.
Estaba al alba María,
porque era la enamorada.

«¡María!», la voz amada.
«¡Rabbuní!», dice María.

El amor se hizo un abrazo
junto a las plantas benditas;
las llagas glorificadas
ríos de fuego y delicia;
Jesús, esposo divino,
María, esposa cautiva.

Estaba al alba María,
para una unción preparada.

Jesús en las azucenas
al claro del bello día.
En los brazos del Esposo
la Iglesia se regocija.
¡Gloria al Señor encontrado,
gloria al Dios de la alegría,
gloria al Amor más amado,
gloria y paz, y Pascua y dicha! ¡Aleluya!

Estaba al alba María,
es Pascua en la Iglesia santa. ¡Aleluya! Amén.
Saludos Pascuales
Mary

Anónimo dijo...

Mary, gracias por tu entrada, muy linda, y por la fuente, que ya hurgaré.

Utópica

Mary Lennox dijo...

¡De Nada Utópica! y ¡Bienvenida!
Mary